NINI, UNA "IDOLA" TOTAL

El 1º. De junio de 1903, en Caballito, uno de los barrios más poblados de la Capital Federal Argentina, nacía una de las figuras referentes de la escena del Río de la Plata: Marina Esther Traverso, a quien conocimos más tarde por su nombre artístico, Niní Marshall. Una artista en todo el sentido de la palabra. Fue imitadora, actriz, humorista, guionista, escritora, directora, periodista, cantante, dibujante; realizando todo con un inmenso talento. La radio, el cine y la televisión la consagraron por ser auténtica de verdad y por poseer un magnetismo sin igual con el gran público. Filmó más de cincuenta películas, tiene casi cuarenta participaciones radiales, quince presentaciones televisivas y obras teatrales por doquier, recibiendo infinidad de distinciones. Hizo reír a carcajadas desde los escenarios, los micrófonos o los sets, enseñando su perfil, ese que lentamente van deslizando los que saben. Doña Jovita, Cándida y Catita, la marcaron por siempre. Para muchos fue la Chaplin con faldas, para otros la mujer que hacía reír, para la mayoría la dama del humor. A comienzos de los años cuarenta debió abandonar rápidamente su país para exiliarse en México DF, como lo volvió a hacer en los cincuenta, porque consideraron el lenguaje de sus personajes como una deformación del idioma (¿?) –que quedaría para esos que hoy en día dicen que práctican el arte de hacer reír desde la pantalla chica- En 1989, la destacaron como Ciudadana Ilustre de la Nación. En sus memorias, colgó una frase para la historia “fui una señora de su casa que se hizo la graciosa”…