KIM NOVAK, UN MONUMENTO A LA MUJER

El cine no seria tal, si Kim Novak no hubiese existido. Su belleza, encanto, naturalidad y misterio que la rodeaba, cimentaron una fama que dura hasta hoy en día. Increíblemente, cumplió setenta y siete años el pasado sábado 13 de febrero y lo festejó con una gran torta, varias velitas, pocos invitados y una linda familia. Aún sigue casada con el Dr. Robert Malloy, desde 1976. Antes, lo hizo con el actor Richard Johnson mientras rodaba “Moll flanders”, en marzo de 1965; un año más tarde se divorció. Como a toda estrella o luminaria se le atribuyeron fuertes romances, con Frank Sinatra, Sammy Davis Jr., Gary Grant y con algún otro no tan conocido. Pero, a ésta altura todo ha quedado en el olvido, según parece, ya que reside entre sus dos mansiones que posee en California y Oregón, donde cría caballos, llamas y otros animales y sostiene que está sumamente feliz junto a los suyos y que de vez en cuando la atrapa la nostalgia y vuelve a observar en forma de DVD y con pantalla gigante sus eternas películas. Esas donde maravillaba con su figura y la expresividad de sus tan bonitos ojos.